El informe definitivo de la Intervención General de la Administración del Estado, según la prensa, revela cómo se malbarataron 12.100 euros en un año sin justificar, entre ellos 84 almuerzos por 10.680 euros. No se cumplen los criterios establecidos por ley para la producción interna. Los contratos recogen objetivos de audiencia que no siempre se alcanzan. La auditoría debería ser un punto de inflexión, la prueba clara de la deficiente gestión empresarial con fondos públicos.
Se observan "incumplimientos" de las normas de contratación "como la de medios de producción sin el preceptivo informe de falta de disponibilidad o de idoneidad de medios propios".
¿Quién es el máximo responsable en la administración de los medios propios disponibles?: José Luis Muñiz, el mismo que señalado en la misma auditoría por sus malas prácticas, según la prensa.