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AUDITORÍA A RTVE: PRODUCCIÓN EXTERNA
La semana pasada la prensa nos desveló aspectos del informe definitivo de la auditoria del Intervención General de la Administración del Estado, órgano de control interno del sector público estatal, a la Corporación. Extraemos fragmentos de algunas publicaciones:
El documento destaca que TVE no cumple los criterios establecidos en la ley. Las horas de producción interna de programas informativos e institucionales se sitúan en el 96%, mientras que la norma fija ese objetivo en el 100%. Las horas de producción interna de los programas de entretenimiento y variedades suponen el 48,1%, por debajo del 55% marcado como objetivo. Sí se cumple el porcentaje de contenidos educativos, divulgativos y de actualidad (68,9% frente al 60% exigido).
(El PAÍS)
La misma auditoría da un tirón de orejas a la gestión de RTVE en la etapa de Pérez-Tornero, al especificar que "recomendamos una mayor utilización del personal y medios de la actual Corporación, lo que contribuiría a disminuir el coste de esas producciones".
Además, en este Plan de Auditoría Pública 2022 sobre la Corporación de RTVE también se insiste en que se observan "incumplimientos" de las normas de contratación "como la de medios de producción sin el preceptivo informe de falta de disponibilidad o de idoneidad de medios propios".
(Público)
Hacienda pone el foco también en el hecho de que las audiencias de los programas contratados no alcanzan la media incorporada en los contratos, pese a lo que RTVE no reclama ninguna cantidad de dinero a la productora. «El share previsto recogido en la memoria y sobre el que se fundamenta la contratación de los programas, difiere sensiblemente del share obtenido en la mayoría de las contrataciones», señala. Y añade: «Las contrataciones recogen una cláusula sobre indemnización a favor de la Corporación RTVE por falta de cumplimiento de la fecha de entrega de los materiales, que, a pesar de haberse producido dichos incumplimientos, no se ha aplicado».
Este es un ejemplo de las audiencias que incluye la IGAE en el informe:
Y éste es el coste de los programas analizados, entre los que se encuentran algunos polémicos como el de Jesús Cintora, que fue finalmente sacado de la parrilla en el verano de 2021:
(okdiario)
Al referirse a los formatos que son renovados por la corporación pública, el informe observa “una disminución en los shares marcados como objetivo y los shares obtenidos, que no va acompañada de una disminución en los costes de los mismos”. Es decir, pide que si un formato no tiene la audiencia esperada, si es renovado no obtenga la misma inversión. RTVE se defiende ejemplificando con Cuéntame, asegurando que han procedido a “la reducción de la duración de los episodios de 70 a 60 minutos”, y añade que como contexto que “la llegada de las plataformas ha disparado los costes salariales de producción de ficción, respecto a equipo técnico y artístico, debido a un incremento sustancial de la demanda”.
Sin embargo, Hacienda le lleva la contraria al asegurar que en el caso de Cuéntame “no se ha producido un descenso global en la duración de los programas, y dicho descenso no tiene por qué conllevar siempre una elevación, aunque sea ligera, del coste por minuto”.
(verTele)
La auditoria pone de manifiesto que las diferencias de coste no quedan siempre reflejadas en las audiencias conseguidas y especifica que de los siete programas analizados con un coste por minuto superior a más de 5.000 euros, solo en uno de ellos se alcanza la cuota de audiencia de referencia marcada en el contrato. Las diferencias entre la audiencia prevista en la memoria y la real es a veces abismal. Cuéntame cómo pasó preveía alcanzar un 18% pero obtuvo un 11,1%, Dos vidas se marcó un 9,8% y registró un 6,6% y Prodigios contemplaba un 12% cuando en realidad obtuvo un 8,1%. Fuera del horario de máxima audiencia, solo dos de los 10 programas analizados alcanzan el share objetivo marcado en el contrato: Acacias 38 y Aquí la Tierra.
(El PAÍS)
El programa más caro para la televisión pública en 2021 fue La Hora de la 1, con 16.428.000 euros -el 71,6% de recursos propios y el resto de producción externa-. Sin embargo, este espacio obtuvo de media un 8,5% de share, dos puntos y medio menos que lo que estimaron en el contrato, según el documento de auditoría de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) del Ministerio de Hacienda al que ha tenido acceso DIRCOMFIDENCIAL. Le sigue la serie Dos Vidas, para la que se desembolsaron 15.314.000 euros -prácticamente todo fueron costes externos-. Aspiraba a lograr un 8,5% de share y finalmente se quedó en un 6,6%. Cuéntame también se queda corto. RTVE pagó por la familia Alcántara 12.682.000 euros -también prácticamente toda la cuantía son costes externos-, esperando alcanzar un 14% de share, y se quedó en el 11,1%. (…)
Además de Fuerza de Paz, los espacios más caros por minuto, hasta superar los 5.000 euros son: Estoy Vivo, Cuéntame, Hit, Parot, Sequia y ¿Y si sí…?. De estos siete, solo este último, consigue el nivel de audiencia de referencia marcado en el contrato y solo dos -este mencionado y Cuéntame– logra un share mayor a los dos dígitos.
La auditoría de Hacienda sobre la gestión de 2021 reclama a la corporación pública un modelo de programación más sostenible.
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